El pterigión es un crecimiento carnoso, indoloro y no canceroso en la parte blanca del ojo, generalmente causado por la exposición a rayos UV (luz solar). Puede permanecer pequeño o crecer hasta cubrir parte de la córnea y afectar la visión.
Cuando el pterigión distorsiona la visión, crece continuamente o causa irritación persistente, es necesario someter a una cirugía que es indolora, se realiza con anestesia local (el paciente permanece despierto) y suele durar unos 30 minutos. La intervención quirúrgica más común consiste en extirpar el pterigión y luego tomar una parte de la conjuntiva (la membrana que cubre la parte blanca del ojo) para cubrir el área afectada.